Traigo al blog un interesante articulo firmado por Jesus Ollero, periodista y hermano de la Amargura, sobre la estacion de penitencia de la cofradia de San Juan de la Palma de este año y publicado en la pagina web silencioblanco.net
Cerradas las puertas, desmontados los pasos, vuelve la normalidad a los templos tras una semana de gozo por brillante y por completa, lo que no sucedía desde 2001, y lo hace en San Juan de la Palma con el regusto de una Estación Penitencial espléndida el Domingo de Ramos. Sin circunstancias externas que dificultaran cuestiones ya de por sí complejas, la cofradía llenó Sevilla con su presencia de la Cruz de Guíaal último músico del palio, completando una noche de ensueño en la primera Semana Santa con José Luis del Pueyo al frente de la corporación.
Sin cortes, con un ritmo elevado sin transmitir prisas, con los pasos andando sin correr, con el cuerpo de nazarenos pegado sin estorbarse, pocas sombras aparecen en un recorrido luminoso y radiante. Acaso, el más pronunciado no corresponde al recorrido en sí, sino a los preparativos, uno de esos aspectos que depende exclusivamente de la Hermandad, pues en la calle ya intervienen factores que no siempre quedan al control de la organización desarrollada por la Junta de Gobierno y sus colaboradores.
Que “la Amargura puede con todo” es una frase que cualquiera ha escuchado, celebrado e incluso enunciado, pero no puede ser el vehículo para un mal entendido sentido de la responsabilidad. Esa frase no puede esconder el desempeño en tan fundamental tarea como el vestuario de la Virgen, cuestión que este año ha provocado un extendido malestar y que debe ser objeto de análisis para su mejoría. La Amargura es una imagen exigente, y exigente debe ser la Hermandad; no caben conformismos como de hecho no caben en el espléndido comportamiento este año tanto de la cofradía y su cuerpo de nazarenos como de los dos pasos, fruto de ese incesante empeño en la excelencia. Que la Amargura no luzca algunas joyas que eran cedidas cada Domingo de Ramos por hermanos, como ha ocurrido este año, es potestad de los oficiales; velar por detalles como el mencionado debe ser obligación. En la salida, se solucionó con rapidez una pequeña fisura en la ráfaga de la corona, producida en la primera levantá dentro de la iglesia. Enfilando ya la puerta se intervino de urgencia y no se apreciaron mayores problemas en todo el recorrido.
Salvo esta cuestión puntual, pero de notable relevancia, apenas pequeños detalles, si bien alguno se arrastra de año en año como el mejorable tránsito de la cofradía por la Catedral: la situación reiterativa de que la cofradía quede estancada en el Templo Metropolitano, con el misterio en Alemanes y el palio sin poder salir de la Puerta de los Palos, no ha tenido solución.
Los 10 minutos de retraso en Palos se han convertido en habituales. De hecho, el tiempo de paso se antoja demostradamente corto en Carrera Oficial, con un margen de cofradía de negro. 35 minutos de paso no parece una correspondencia lógica y cofradías de similar tamaño cuentan con diez, quince y hasta veinte minutos más de tiempo. Un margen ligeramente mayor permitiría a la Amargura no ampliar cada año el tiempo de retardo en la Puerta de los Palos. El palio ha entrado en la iglesia en hora por primera vez en años, con la salvedad de una reciente estación en la que el riesgo de lluvia aligeró sobremanera el regreso.
Este año se ha introducido la posibilidad de que hermanos de la cofradía con más de 75 años o impedidos accedieran a una parcela de sillas reservadas. Diez fueron las solicitudes y todo transcurrió con normalidad dentro de las lógicas dificultades de acceso a la Plaza para personas de avanzada edad. Dentro del templo, se contabilizaron unas 80 bajas de nazarenos, que sacando papeleta de sitio no acudieron a realizar la Estación de Penitencia, lo cual supone cerca de un 10% del total.
Parece haberse aparcado la idea de lanzar la Cruz de Guía hasta la Plaza de los Carros para dar salida a todos los tramos del paso del Señor –al menos, la cofradía se detuvo en varias ocasiones durante la salida–, así como el hecho de comenzar la interpretación de Silencio Blanco antes de franquear el dintel: el clarín comienza con el paso totalmente en la calle –lo cual no es ni mejor ni peor, pero en el palio Amargura sigue comenzando con el palio completamente dentro–. Que sea discreción de los capataces sería un buen gesto, pero en caso contrario provoca una incoherencia perfectamente evitable –insisto, salvo que sea por recomendación de los capataces–. Más aún, el avance del misterio en la Plaza de San Juan de la Palma forzosamente debe haberse ralentizado, pues cuando Silencio Blanco comenzaba en el templo el paso tenía tiempo de romper en la calle con el rush final de la marcha mientras esta vez al enfilar la vía de la Plaza ha tenido que hacerlo a tambor al agotar la marcha completamente.
Con las peculiaridades que el recorrido de ida incluye, pues los retrasos del día condicionan enormemente el trayecto hacia Campana, la entrada en Carrera Oficial y el transcurso por los Palcos ha resultado sencillamente excepcional, difícil de mejorar tanto en cortejo como en los pasos. Espectacular como siempre el Desprecio de Herodes, una referencia indiscutible y una forma de entender un misterio imitada con toda la razón, este año cabe una mención muy especial al palio de la Amargura, cuya cuadrilla ha mostrado un nivel equiparable al de la mejor época de los 80. Su paso por la Plaza de San Francisco, con Amargura y con Soleá dame la mano finalizando en la última silla de los Palcos, es de esas cosas que quedan en el recuerdo.
Fuera ya de Catedral, mientras el Desprecio de Herodes aconseja afrontar Argote de Molina de manera eficaz y sin arabescos y en absoluto desluce su andar decidido el tambor, no parece acertado prescindir de La Madrugá –o una marcha similar– para la subida del palio. No debía estar previsto así, o al menos no se transmitió debidamente al capataz, que arrió el paso antes de la esquina de Placentines cuando es su costumbre y su exigencia a la cuadrilla cubrir el trayecto entre el final de Alemanes y la llegada a Francos sin detenerse. Al arriar comenzó La Madrugá, pero ya no era lo mismo.
Imponente aún, falta algo si la Amargura cruza a tambor por dicha cuesta, máxime cuando ya la concurrencia espera esos suaves toques que emulan los pitos del Silencio y que avanzan una marcha que tardó años en ser interpretada en la cofradía después de un largo debate que sin embargo no se ha producido posteriormente con otras composiciones, como puede ser el caso este año de Margot, la cual el suscribiente no tuvo la ocasión de escuchar en el palio y que ha recibido más halagos fuera de la hermandad que dentro (seguramente por esta idiosincrasia tan particular que dejó en el cajón la marcha de Abel Moreno durante años y años). Pensar que a tambor se gana tiempo en esta cuesta sería un error demostrable y demostrado.
La impresión que ofrece el recorrido de vuelta es de notable estabilidad. Aunque hay hermanos, muchos y notables, que sueñan con recuperar Tetuán, el embudo del Banco de España y que cada año que pasa el Amor transmite menor urgencia en que se recupere el trayecto anterior va cimentado el recorrido por Argote de Molina, Francos, Salvador y Cuna. Indudablemente, los pasos agradecerían un recorrido más ancho (Plaza Nueva-Tetuán-Velázquez-O'Donnell-Campana), igual que el cuerpo de nazarenos, y es ahí, junto a los condicionantes de público de ciertas calles y al margen de los lógicos gustos particulares, donde se mantiene activo el debate.
Particularmente, la estrechez de Santa Ángela proporciona un gran recogimiento a costa de una de las vueltas con más enjundia de todo el recorrido, la de Alcázares hacia el convento. Al término de las obras de la Encarnación será el momento de valorar si se mantiene el actual recorrido o se recupera el anterior. Ya dentro de la calle, la valla de Alcázares es un peligro potencial al perderse la única vía de evacuación en 200 metros. Igualmente, no parece justificada la desertización de la acera del convento, algo que no ocurre al pasar la Macarena, por ejemplo. Las recomendaciones del Cecop dejan a la cofradía un cierto margen de decisión.
La ausencia de contingencias externas y el control de las propias abrochan una Estación de Penitencia, con las ligeras salvedades reseñadas, espectacular y que cualquier firmaría de año en año. Aunque la Amargura pueda con todo, se debe ser exigente, y en esa exigencia hay que felicitar a los responsables de la Estación de Penitencia y felicitarnos todos por una Amargura tan llena de gozo.
Jesús Ollero actualmente es editor del portal web de Diario de Sevilla y es hermano de la Amargura desde 1975.
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3 comentarios:
Lleva razón Jesús O. en las reflexiones que formaliza sobre el vestuario de nuestra Dolorosa. Este año ha dejado mucho que desear. Creo que he sido yo mismo quien no sé si en este mismo Blog o en el del hermano Antonio B. he usado esa frase: "la Amargura puede con to". Es ciertoque no necesita de nada para realzar su patética, su trágica belleza. Pero ello no nos debe hacer olvidar que la Amargura ha de vestirse como debe vestirse. Habitualmente es una de las Dolorosas mejor arregladas, con estilo propio, arte y buen hacer que le debemos a nuestro hermano Joaquín. Desde que él la viste la Amargura es más Amargura si cabe. Pero es cierto que objetivamente hablando como mejor luce la Amargura es con sus rostrillos de tisú de oro; le sientan bien, la favorecen, la dotan de originalidad, personalidad y estilo propios. No se debe descuidar tan importante cuestión ni mucho menos someterla al capricho de quien en cada momento sea el Prioste pues en los tiempos que corren de dudoso gusto no se debe confiar en cualquiera.
El informe del Consejo sobre número de nazarenos "nos pone a güevo" solucionar nuestros problemas de horarios. Sin embargo mucho me temo que nuestras ansias de colaborar, de ceder siempre, de no dar la nota, de no reivindicar seria y terminantemente "lo nuestro" nos haga perder esta magnífica oportunidad.
Manifestar en otro orden de cosas mi acuerdo con que los pasos salgan de la Iglesia con las bandas ya sonando. Ello nos evita escuchar saetas de dudoso gusto y calidad, perder tiempo y permite al misterio encarar Feria con su primera marcha ya acabada... así puede romper. Al palio le facilita su salida y prepara y dota al momento de la salida del más perfecto ambiente. La música calla al público y lo recoge.
Otra cosa. No sé si habrá que esculpirlo en mármol, pregonarlo desde la espadaña o pregonarlo por las esquinas con timbales y ministriles que el manido aforismo "las marchas ralentizan y los costaleros se retardan con la música" es sencillamente FALSO y ERRÓNEO. Afirmar esto es desconocer absolutamente las circunstancias y sentir de la cuadrilla del palio (30 años de historia). Mis charlas con algunos de sus miembros me confirman que nuestro palio no solo les da respeto... ¡les causa pánico! A alguno le oí decir que la Amargura no es un paso: es el acorazado Potemkin (y han portado palios muy poderosos, Dulce Nombre, Madre de Dios de la Palma, Quinta Angustia... algunos de ellos van a título particular en Carretería, Gitanos, Guadalupe... ninguno de ellos es un cajón de gambas). El nuestro es -a mucha distancia dicen- el peor de todos. Hay una regla de oro entre ellos y basta con acudir a cualquier ensayo para comprobarlo: "pasito dao pasito quitao". Cuando más aliviado van es con ese paso cadencioso y abierto que alivia los kilos y permite andar. Como el palio se clave en el mismo adoquín en cuestión de minutos y al decir del "Yerno" aparece "LA GUADAÑA". LOS MÁS VETERANOS SABEN QUE COMO LA VISERA CAIGA -1ª Y 2ª TRABAJADERAS- NO PODRÁ RECUPERARSE EN TODA LA NOCHE. La música, si es buena, permite al palio no solo más soltura en el andar sino incluso más rapidez. Marchas como Ione, Mater Mea, Soleá, Jesús de las Penas, hace que nuestra cuadrilla "ande más largo", vaya más descansada y relajada y por tanto también más rápido. Desconocer esto es ignorar cuestiones esenciales. Conclusión lógica: subir el Bacalao a compás de cualquiera de las citadas no solo lo haría más rápido sino también, es evidente, más elegante y señorial y en menos tiempo. La música no sonó porque había órdenes expresas del Fiscal y del Diputado Mayor para que no se tocara. Me lo confirman algunos de sus músicos.
Por el contrario alguno de los muermos de marchas que se tocan (la sonata de piano de Chopin, Sgda. Lanzada, la infumable de la muerte de Ases -esta sevillana tela- y la novelera de Margot, que yo eliminaría sin dudarlo del repertorio) clavan a la cuadrilla sobre el terreno, la castigan y la demoran o requieren un mayor número de órdenes del capataz.
Como segundo capítulo la estrechez de Sor Angela será o no bonita, es cuestión opinable, pero desde luego el camino para acceder a ella desde el Valle hasta San Pedro es sin duda el más espantoso y deslucido que conozco. Y de seguro conlleva una pérdida de tiempo por lo que de complicado se requiere para salvarla. El tiempo que se gana por un lado se pierde irremisiblemente por otro. La vuelta de Alcázares era probablemente una de las mejores de nuestro recorrido.
Finalmente y en cuanto al CECOP ¿éste está puesto para servir a las Hdades. o para darles por culo? Pues eso: se habla clarito con el Sr. Alvarez Riestra Jefe Superior de Policía o mejor que no vengan, que siempre hemos solucionado solitos nuestros problemas la mar de bien...
Abrazos amarguros...
A lio, la imagen de Maria Santisima de la Amargura esta espectacular con casi cualquier cosa, no hay mas que ver las fotos que hizo Eugenio Borrego, con una simple tunica de color claro con capucha cuando se restauro en el IAPH, eso es una cosa y otra distinta es que hay que cuidar el como se viste a la imagen, mucho mas para grandes ocasiones como son el besamanos, la funcion principal y , como no, en el paso.
Siempre diran que sobre gustos no hay nada escrito.... oiga es que hace años que se desterro el manto de recorte para vestirla de diario con uno bordado.
Lo del informe Draco aun anda escociendo por ahi, se demuestra que nuestra cofradia ademas de mantenerse en numero de nazarenos (cosa que no todas pueden decir) tiene un lento pero continuo crecimiento a tener en cuenta.
La musica.... ayyyy la musica...Tomando tus palabras , y hablo en general, no solo de la Amargura, No se en que idioma hay que decirlo, o si hay que dar con esa lapida de marmol en la cabeza al personal, esta demostrado que los pasos hoy en dia andan cuando hay voluntad de que anden y que da gusto ver andar un paso con una marcha.
Sobre la cuesta del bacalao... hombre es verdad que es uno de los sitios donde algunas cofradias se entretienen mas. Por esa regla de tres ¿Por que no se pasa a tambor por la Campana? uno de los sitios donde algunas cofradias se entretienen mas.
Lo de la calle Imagen es tremendo y mira que pasan por alli cofradias y que en el fondo es un sitio muy comodo. Y ya que estamos, se podra decir que en Alcazares habia poco publico, pero es que lo de la estrechez de la calle Santa Angela son ganas de meterse en un callejon, justo antes de uno de los momentos mas emotivos de todo el recorrido.
Lo del despliegue policial En Santa Angela es tremendo, y ademas somos los unicos que lo padecemos.
Como reflexion final, ¿por que tengo la impresion de que en la calle Santa Angela tiene mas fuerza un reportero de la agencia Reuters que la hermandad de la Amargura?
Y despues a los curiosos (que alguno hay entre los visitantes del blog) les invito a que investiguen sobre las deliberaciones que hubo a cuenta del intinerario de la cofradia a principios de los años 80 del pasado siglo, alguno se quedaria pasmado.
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